Las encías son el principal indicador para conocer el estado de nuestra salud bucodental. Debemos limpiarlas igual que los dientes para que nuestras encías se encuentren en perfecto estado y tengan el aspecto de color rosado. Pero… ¿Y si las encías se vuelven de color blanquecino? ¿Y si te sale la línea blanca de debajo de los dientes?
Cuando las encías adoptan un tono rojizo o blanco es una señal de que algo falla en nuestra salud bucal. Con frecuencia, mientras nos limpiamos los dientes no prestamos la atención necesaria a las encías y eso puede tener consecuencias negativas que no dependen de nosotros. Es importante una prevención a tiempo y cuando llega a salir la línea blanca en la boca ya puede ser demasiado tarde.
¿A qué se debe este tono blanquecino? Frecuentemente esta línea aparece por falta de higiene oral. Esto puede provocar la acumulación de placa dental, la cual se pega a las encías ocasionando su inflamación y cambios de color. Por otro lado, el tono blanquecino también puede ser causa de un principio de candidiasis oral.
Como no queremos que este problema aparezca o llegue a mayores consecuencias a continuación queremos darte algunos trucos para mantener las encías sanas.
Cómo mantener las encías sanas
Las enfermedades de las encías pueden llegar a provocar la pérdida del buen estado de nuestra boca. Se trata de gingivitis o periodontitis que provocan síntomas como la inflamación, el sangrado o el enrojecimiento de las encías. Esta enfermedad no es peligrosa, pero si no se trata a tiempo puede avanzar hasta periodontitis o piorrea y destruir los tejidos que soportan el diente.
¿Qué se puede hacer para mantener unas encías más sanas? El punto clave más importante es mantener una higiene bucodental diaria. La técnica de cepillado es fundamental para limpiar con eficacia las encías. Un consejo es: no hacer mucha presión con el cepillo para evitar dañar el tejido gingival.
Pero…¡¡No olvides cuidar tu alimentación!! En la mayoría de los casos la línea blanca procede de algunos alimentos que se quedan pegados a la encía. La salud depende, en gran parte, de nosotros mismos. Por eso, te recomendamos que mantengas una dieta sana y equilibrada, así como que moderes el consumo de alimentos perjudiciales para tu sonrisa tales como el azúcar y los ácidos.
Debes visitar al dentista regularmente para evitar cualquier tipo de problema.